La demanda, contra el Departamento de Salud, concierne «los experimentos médicos que tuvieron lugar en Guatemala desde 1946 a 1948 y que duraron potencialmente varias décadas más por parte de doctores estadounidenses y guatemaltecos y responsables gubernamentales, como ha admitido el gobierno estadounidense», explicó el texto de la querella.
La demanda, publicada en un blog denominado Legal Times, fue presentada ante una corte federal en Washington.
La demanda cita como ejemplo los experimentos que se realizaron en Tuskegee, en el estado de Alabama, donde se hicieron experimentos similares a víctimas afroamericanas entre los años 1930 a 1970, que fueron indemnizadas.
Los científicos estadounidenses inocularon enfermedades venéreas a unos 1.500 guatemaltecos, entre ellos prostitutas, reos, enfermos mentales y soldados, para probar la efectividad de medicamentos contra esas aflicciones.
«En ningún momento a lo largo de los proyectos del Servicio de Salud Pública en Estados Unidos y en Guatemala el equipo (médico) logró un consentimiento informado» de las víctimas, recordó el texto.
El caso fue tildado de «inmoral» por el presidente Barack Obama el pasado octubre. Obama llamó a su homólogo guatemalteco, Alvaro Colom, para disculparse por ello.
Pero ante la falta de una propuesta de indemnización por parte del gobierno estadounidense, los siete litigantes que encabezan la lista de demandantes planteó la querella, que reclama daños y perjuicios cuyo monto será fijado durante el juicio.
El caso es representado por dos firmas de abogados estadounidenses, Conrad Scherer y Parcher, Waichman&Alonso.