En promedio, 4.000 personas mueren prematuramente en Chile cada año debido a la mala calidad del aire, por la exposición al material particulado fino PM 2.5.

Así lo informó este miércoles la ministra María Ignacia Benítez al dar cuenta en La Moneda, junto al subsecretario Ricardo Irarrazaval, del «Informe del Estado del Medio Ambiente»,  estudio que por primera vez reúne la información más relevante en materia medioambiental, detallando riesgos para la salud humana, ciudades más contaminadas, niveles de ruido o disponibilidad de áreas verdes que tienen las distintas comunas del país.

De los elementos que flotan en el aire, el material particulado fino es el más dañino para la salud, según los especialistas, ya que se concentra en los pulmones a nivel alveolar. Es emitido por fundiciones de cobre, centrales termoeléctricas y calefacción residencial a leña, explicó la ministra, que indicó que en la Región Metropolitana la comuna con mayor concentración es Cerro Navia.

Hacia el norte, los municipios más comprometidos son Tocopilla, La Calera y Puchuncaví, y Rancagua, San Fernando, Coronel y Coyhaique hacia el sur.

Benítez destacó el esfuerzo de su cartera por «transparentar» esta realidad, junto con subrayar que «estas 4.000 muertes no es algo que ocurra ahora, ha ocurrido hace mucho tiempo; no es un problema de hoy».

En este sentido, resaltó el esfuerzo de contar con «normativa que se hace más exigente para poder abordar estrategias que permitan reducir los niveles de concentración de material particulado fino», ya que «si uno no tiene una normativa clara, no puede tener estrategias para abordar ese contaminante».

«Teniendo normativa, la legislación permite declarar zona saturada, establecer planes de descontaminación y hacer restricciones. Sin normativa de calidad del aire para material particulado fino no se pueden elaborar esas estrategias, por eso la importancia de tener esas normativas», insistió.

Benítez fue consultada por las deficiencias que encontró la Contraloría en el sistema de moniroteo de la calidad del aire, y si bien no se hizo cargo de las críticas, afirmó que se están instalando nuevos puntos de medición para mejorar el sistema predictivo.