Según explicó el Ministro de Salud, Jaime Mañalich, la única excepción que establece el nuevo estatuto respecto de “la píldora del día después” y los menores de 14 años, es una recomendación hecha al funcionario que efectúa la entrega, para contactar al padre o tutor del menor. Este contacto con los apoderados queda a criterio del facultativo y será siempre después de que el fármaco ya fuera entregado.
La redacción del reglamento permite el secreto profesional fundado en que “toda persona tiene derecho a la confidencialidad y privacidad”, tanto de sus opciones como “sobre los métodos y terapias escogidos para la regulación y/o planificación de su vida sexual”.
Según informó La Tercera, en 2011 se otorgaron 6.288 “píldoras del día después”, lo que constituye un repunte del 44% en comparación con 2010, cuando se distribuyeron 4.367 dosis del fármaco.
Esta normativa viene a tapar los vacíos que dejaba la Ley 20.418 que, a pesar de estar en vigencia desde 2010, permitía una serie de trabas de partes de los profesionales para aplicarla, en particular con los